Clásico empate. Una frase que pocos quieren escuchar después de un partido tan importante como el Clásico Nacional. Esa frase significa que una vez más los aficionados, tanto del América como de Chivas, se fueron sin la oportunidad de disfrutar una victoria más sobre el odiado rival.
Un clásico que tuvo pocas llegadas a gol y menos emociones. Considerando el hecho de que lo más recordado de este partido será el golazo de Paul Aguilar, se puede decir que una vez más quedó a deber. A primera vista, tanto Matosas como De La Torre parecieron plantear el partido para no perder. Chivas salió con su alineación probada y que le ha venido dando resultados desde el inicio del torneo, mientras que el América hizo cambios en su once inicial, al dejar en la banca a hombres de la calidad de Peralta, Goltz, Pellerano y Arroyo.
El partido comenzó tranquilo, sin mucha claridad por parte de ambos equipos. Los dos salieron cautelosos y a no tratar de cometer errores. Lo que resultó en que hubiera mucha intensidad en la disputa por el balón pero imprecisos en los pases. Tuvo que venir un tiro de larga distancia que se metió justo a unos centímetros de la horquilla izquierda de Luis Michel al minuto 15.
De ahí el partido vino a la baja, ya que el América dejó de buscar el arco rival, y las Chivas no pudieron romper el bloque defensivo azulcrema gracias a que sus embestidas ofensivas eran muy predecibles y poco creativas. Ya en el segundo tiempo, vino el carrusel de lesiones, y consecuentemente de cambios. Primero se fue Sambueza, después Guerrero, unos minutos después Salcido y por último Salcedo.
Cuando parecía que las Águilas continuarían con la paternidad sobre Chivas de visita, vino una desatención por parte de la defensiva azulcrema, el cual aprovechó Aldo De Nigris para primero hacer un recorte ante la barrida infantil de Pablo Aguilar y después vencer a Moisés Muñoz y empatar el partido. Empate que se mantendría hasta el final.
Con el empate, las Chivas se mantienen en primer lugar de la clasificación, mientras que el América sigue bajando posiciones y ahora se encuentra en séptimo lugar general. Quedan dos fechas por jugar, solamente seis puntos en disputa, pero considerando que esos mismos seis puntos son los que separan a Jaguares, que es 14to, del líder Chivas estas dos últimas fechas se pondrán interesantes para averiguar quién entra a la Fiesta Grande y quien se queda fuera.
Pareciera que tanto la Universidad de Guadalajara y el Puebla están compitiendo para ver quien termina haciendo peor las cosas y así definir quien desciende. Los Melenudos tienen serios problemas ofensivos lo que termina afectando en su búsqueda de puntos, y más considerando todas las fallas de gol que ha tenido el ecuatoriano Juan Anangono. Esas fallas resultaron en una derrota más, esta vez ante Santos.
Los de la Franja, en cambio, tienen fallas increíbles en lo que se refiere a la defensiva. Parece que el haber conquistado el título de Copa no fue suficiente para impulsar a los poblanos a desarrollar mejor futbol y así ganar puntos que le ayuden a salvarse del descenso. Un hombre de tanta experiencia y con tanto recorrido en el futbol mexicano como Mauricio Romero, cometió errores fatales tales como la jugada del autogol o una falta tan obvia que el árbitro no tuvo opción más que marcar penal.
Lo que es cierto es que si los Leones Negros hacen cuatro puntos, se salvan de manera automática. Pero en este momento, con el futbol que están desarrollando actualmente, es difícil pensar que alguno de los dos involucrados sumara puntos en lo que resta del torneo.
Nací en Los Ángeles, E.U.A. Soy ferviente aficionado desde temprana edad al fútbol y demás deportes. Estudio en el Centro Universitario del Sur en Ciudad Guzmán, Jalisco y estoy en 3er Semestre de la carrera de Periodismo. Ahí descubrí una nueva pasión; la cultura. Planeo utilizar todos mis conocimientos y esfuerzos en llevarles la mejor información posible en estos ámbitos.
