Más de 4o mil pinos y cedros serán entregados a productores de aguacate del sur de Jalisco como parte del programa de reforestación 2019 de la Asociación de Productores Exportadores de Aguacate de Jalisco A.C.
Los árboles cumplirán la función de cercas vivientes y rompevientos que servirán de protección para el fruto del aguacate.
“En total tenemos este año 39 beneficiarios. Varios de ellos tienen muchas unidades de producción, por eso alcanzamos a abarcar una extensa área aquí en el sur de Jalisco. Una vez que se entregan los árboles se hace firmar a los productores una carta responsiva en la que ellos se hacen responsables del adecuado mantenimiento de los árboles, y también nos dan autorización de poder realizar visitas de inspección”, detalló Armando García de APEAJAL.
La entrega dio arranque en el municipio de Concepción de Buenos Aires y de ahí continuarán a otros municipios de la región como Zapotlán y Gómez Farías.
El año pasado fue la primera edición del programa. Lograron entregar más de 50 mil árboles provenientes de viveros de CONAFOR. Sin embargo, debido a detalles de la planta y el manejo que los productores le dieron, tuvieron una supervivencia de alrededor del 50 por ciento.
“La supervivencia es un tema delicado porque el año pasado no tuvimos una supervivencia como hubiéramos esperado. Tuvimos una supervivencia de alrededor del 50 por ciento. Creemos que se debió a la calidad de la planta y al manejo que también le dan algunos de los beneficiarios”, comentó.
APEAJAL contará con su propio vivero
Con la finalidad de que la planta sea aprovechada al cien por ciento por los productores, la APEAJAL ya puso en marcha la construcción de un vivero con especies adaptables al entorno del sur de Jalisco para las reforestaciones del año entrante.
“El vivero se encuentra en el municipio de Zapotlán el Grande, en un huerto semillero, ahí hay un espacio que se le va a asignar a este vivero. Como primera meta, en el primer año, tenemos pensado producir 50 mil unidades de tres especies diferentes, una de ellas es cedro blanco, otra de ellas es pinus douglasiana, y una tercera que está destinada a ecosistemas de selva baja que es el guamúchil”.
Como meta a largo plazo, pretenden que el vivero tenga una producción anual de hasta 300 mil unidades con mayor calidad en la raíz principalmente, para con esto, elevar el nivel de supervivencia en las reforestaciones.
Periodista egresado del CUSur. Aficionado por los deportes, la política y el periodismo. En El Suspicaz funge como co coordinador. También escribe para NTR Guadalajara y Letra Fría. Integrante de #CONNECTASHub.
