En fecha FIFA, mientras algunos aún se juegan su pase al mundial mediante el repechaje, el líder de CONCACAF tuvo dos encuentros clave de preparación rumbo a Rusia 2018; los rivales fueron dos selecciones también clasificadas y con etiqueta de potencias europeas.
La primera prueba fue la selección de Bélgica en la ciudad de Bruselas, enfrentamiento que causaba mucha expectativa, ya que después de aproximadamente tres años, México volvía a enfrentar en un partido amistoso a una selección europea en el Viejo Continente, a Bélgica, una potencia mundial en la actualidad debido a la gran generación de jugadores con la que cuenta.
Sí bien México tuvo la pelota en una buena parte del partido, Bélgica fue quién generó más, fue más peligroso, convirtiendo a Guillermo Ochoa en figura, con al menos tres atajadas para destacar. No fue la mejor versión de la selección belga, pero a medio gas demostró su superioridad ante la deficiencia de la defensa mexicana. Bélgica sufrió debido a ausencias en la zona baja, que ocasionó emociones en el ataque de ambos equipos.
Romelu Lukaku, con dos goles, y Eden Hazard fueron los anotadores de la selección de Bélgica, mientras que de parte del conjunto mexicano anotaron Andrés Guardado de penal, y doblete de Hirving Lozano que confirma el gran momento por el que está pasando, convirtiéndose en el jugador mexicano en mejor forma en estos instantes, demostrando que ya está listo para la titularidad en la selección.
Luego del valioso empate en contra de Bélgica, México enfrentó en el estadio Energa Gdansk a la selección polaca, en un partido que en la previa pintaba para ser menos complejo que contra los belgas.
Y precisamente así fue, México salió a la cancha haciendo seis cambios respecto al partido anterior, ya algo común bajo la dirección de Juan Carlos Osorio. La selección se mostró mejor y con mayor idea en este partido, tuvo más claridad de ataque y menos complicaciones en defensa, sin llegar a hacer un partido perfecto.
La selección polaca se mostró falto de idea, con varias ausencias, destacando la de su figura, Robert Lewandovski. Polonia sólo logró llegar dos veces sin complicar al portero José de Jesús Corona, mientras que México dominó. El gol cayó en el primero tiempo a cargo de una gran jugada del delantero del Benfica, Raúl Jiménez, que levanta la mano para más minutos con la selección.
Estudiante de Periodismo, inclinado al deporte y futbolero de toda la vida.
