Jilotlán de los Dolores, en el sur de Jalisco, fue considerado por el gobernador Enrique Alfaro Ramírez como el único foco rojo en cuanto a inseguridad rumbo a las elecciones. La mayoría de partidos decidió no registrar candidatos y, el PAN, así como Movimiento Ciudadano, decidieron renunciar.
El motivo de cortar sus aspiraciones a la presidencia municipal fue que recibieron amenazas, Esto provocó que quedara solo una planilla en la contienda: la de Morena.
Ante esta situación en la que no se garantizaba la seguridad ni siquiera para los candidatos, los partidos pidieron al Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) que suspendiera los comicios en el municipio. Hoy fue debatido el tema en sesión extraordinaria del consejo general.
La resolución fue que el IEPC no tiene facultades para suspender o posponer las elecciones y, por lo tanto, en Jilotlán tendría que haber votaciones, así solo esté una planilla registrada.
En un comunicado, el IEPC llamó a la población a no ceder terreno. Dio a entender que el suspender la elección es darle la razón al crimen.
“No podemos ni debemos ceder espacios a quienes pretenden la desestabilización, uno de esos espacios es la Jornada Electoral. La mejor respuesta que podemos dar a quienes apuestan por transgredir el orden sociales salir a votar en paz”.
A su vez, hizo un llamado al gobierno del estado para garantizar la seguridad de los votantes. Pero también de los candidatos. No solo en Jilotlán, sino en todo Jalisco.
Recordar que en abril de 2018, días antes de arrancar con las campañas, asesinaron al presidente municipal con licencia de Jilotlán, Juan Carlos Andrade Magaña. Buscaba la reelección por Movimiento Ciudadano.

Periodista egresado del CUSur. Aficionado por los deportes, la política y el periodismo. En El Suspicaz funge como co coordinador. También escribe para NTR Guadalajara y Letra Fría. Integrante de #CONNECTASHub.