Este 2023 cumplirá cuatro años el proyecto de islas y corredores biológicos. Este consiste en un trabajo conjunto entre la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet), el Patronato Nacional Nevado de Colima, el gobierno municipal de Zapotlán el Grande y la agroindustria para generar espacios de reforestación en la cuenca de la laguna de Zapotlán.
Esta zona del sur de Jalisco ha sido invadida por la agroindustria del aguacate y las berries. El bosque prácticamente desapareció en la zona del valle y con este proyecto buscan recuperar espacios forestales, explicó José Villa Castillo, director del Parque Nacional Nevado de Colima y artífice de este proyecto.
“Islas y corredores biológicos es una estrategia de equilibrio, de negociación con la agroindustria, para instalar tejido de bosques. Es una estrategia súper atinada para equilibrar la naturaleza con la producción, con los empleos, la economía y que la sociedad también tengamos el privilegio de tener la naturaleza al alcance de nosotros”.
José Villa Castillo
El biólogo añadió que “el Parque Nacional lo llenamos de gusanos y de pájaros, está repleto, pero acá no y lo perdimos. No hay árboles, los que hay son casuarinas, cedros blancos, eucaliptos, esos no se llenan de pájaros ni gusanos, perdimos el tejido biológico, perdimos la naturaleza, este proyecto contempla el uso de la ciencia y la tecnología a través de la producción de árboles criollos, nativos, no estamos descubriendo el hilo negro”.
Este fin de semana presentaron el proyecto y sus avances. Describieron que el vivero instalado en la delegación de El Fresnito, en Zapotlán el Grande, tiene alta tecnología para producir árboles nativos de la zona para garantizar su sobrevivencia.
“Esta iniciativa la empezamos a trabajar porque nos dimos cuenta que al estar trabajando en la parte alta de la cuenca también tenía las capacidades técnicas José Villa para desarrollar un vivero de este calado. Tenemos la estructura administrativa desde el Patronato para generar un modelo cien por ciento ciudadano”.
Gerardo Bernabe Aguayo, presidente del Patronato del Nevado de Colima y Cuencas Adyacentes.
El activista ambiental indicó que, aunque es complejo resarcir por completo el daño, es de celebrar que haya apertura por parte de los empresarios de la agroindustria para generar estas islas y corredores biológicos que, poco a poco, van regresando parte del bosque a los habitantes.
“Es casi imposible resarcir el daño que la agroindustria ha generado, este ya es nuestro cuarto año este verano, estamos colaborando en un proceso exitoso de reforestación. Quizá no sean los miles de árboles, pero vamos poco a poco caminando”.
Gerardo Bernabe
Las reforestaciones las realizan cada verano en colaboración con el gobierno municipal y algunos empresarios de la agroindustria que permiten la plantación de estos árboles entre sus huertas aguacateras o invernaderos.
Periodista egresado del CUSur. Aficionado por los deportes, la política y el periodismo. En El Suspicaz funge como co coordinador. También escribe para NTR Guadalajara y Letra Fría. Integrante de #CONNECTASHub.